sábado, 7 de noviembre de 2009

Los (malditos) zapatos negros

¿Se pueden comprar tres pares de zapatos negros en menos de un mes? La respuesta es sí. Y la culpa la tiene Anderson Creperiê que me exige llevar zapatos negros para ir a trabajar...
Yo empecé comprando el primer par (primeros zapatos de la izquierda) en la primera tienda que ví. Lo hice en Dunnes Stores, donde aparte de comida tienen ropa y zapatos a precios asequibles. Pues muy contenta estaba yo con ellos hasta que en menos de dos semanas la suela del zapato derecho se hundió a lo Titanic y ya no he conseguido que vuelva a la superficie. Eso pasa por comprar unos zapatos de 15 euros cuyo arreglo seguro que cuesta bastante más...

En segundo par de zapatos lo adquirí en Penney's, (los zapatos que aparecen en medio) los grandes almacenes más baratos de la ciudad, y mierda, otra vez me sedujo el reducido precio y ese brillo tan elegante que tenían. Pero, que no os engañen lo bonito que parecen, que son más incómodos que pisar una cama de clavos. Ya están guardados en un cajón, listos para coger polvo y telarañas. Si a alguien le gusta, se los regalo. Son todo vuestros.

El tercer (y espero que definitivo) par de zapatos negros (los zapatos de la derecha) los compré antes de ayer en (sí, otra vez caí en el ahorro) en una tienda muy muy barata por el módico precio de 14, 99 euros y aunque puedan parecer los más feos del mundo... son súper cómodos. Y eso es lo más importante cuando una se va a pasar entre 7 y 8 horas diarias trabajando de pie.

Odio estar de pie y odio los zapatos negros.

¿Foto?: Trilogía zapatil

4 comentarios:

Clark Kent dijo...

¿¿Pero los del medio cuándo te los compraste?? En fin, me alegro que los Frankens te vayan bien. En casa ya te refrescas luego los pinrreles, jeje...

Anónimo dijo...

ja ja ja... me encanta! Yo también viví algo parecido cuando era camarera, creo que me compré unos 4 pares en 6 meses. Al final me puse unas zapatillas disfrazadas de zapatos y colaron. ¿Por qué es tan difícil encontrar zapatos cómodos? Por cierto, los segundos me encantan, son preciosos así que antes de tirarlos ya sabes a quien se los puedes dar :I)
--echalotte

Elsita tu hermanita querida dijo...

poor loi...y cómo llevas los dolores de lumbares con tantas horas de pie??? Besitos

Aire Fresquito dijo...

Echalotte, cuando vayamos a visitarte a París, llevaré los zapatos en la maleta ;-)

Elsita, hermana querida, las lumbares las llevo fatal, pero peor están mis dedos del pie que antes eran esqueléticos a lo espárrago triguero... y ahora más bien están como morcillas de Burgos.