lunes, 14 de mayo de 2012

Dark Shadows, ¡qué pestiño!

Mi Juanito ya me lo advirtió al ver el trailer en televisión. El tráiler no apunta bien, me dijo. Yo pensaba lo mismo, pero quizá la película sorprendería. Come on!, nueva película de Tim Burton y mi adorado y querido Johnny Depp, como para perdérsela. Pues fui al cine a verla. Y definitivamente es para perdérsela. De hecho, para arrojar la bobina original al Atlántico y perderla para siempre. Una película tan innecesaria como aburrida. Que dentro del drama gótico quiere meter chascarrillos de humos, que ninguna gracia tienen. 113 minutos insípidos sin palomitas que echarme a la boca o sin un Iphone con el que twittear... que tampoco es mi caso. (Loida ni tiene Iphone ni twitter). ¿Un drama? ¿Una comedia gótica- romántica? ¿Un drama con aromas a culebrón? No es ná de ná. Johnny Depp haciendo de Jack Sparrow y Willy Wonka. Helena Bonhan-Carter que no pinta nada. (Pero como es la mujer de Burton había que meterla como fuera) Al igual que la mitad de la familia Collins. Al menos Michelle Pfeiffer está correcta y aunque la villana de la peli, Eva Green, esté un poco sobreactuada, es de lo poco salvable en el metraje. Ella y los primeros minutos de la película, el intro antes de los títulos de crédito. The rest is all crap.
Esta crítica cinematográfica, (sorry because it is written in english) que me ha pasado mi santo viene a confirmar lo que ya os he contado.


¿Hemos perdido la frescura, talento y originalidad de Tim Burton? ¿Será siempre Eduardo Manostijeras la mejor película del tandem Burton-Depp? ¡Si Sweeney Todd no estuvo nada mal, encima con un Johnny cantantado la mar de bien! ¿Por qué pagar dinero para ver bodrios como Dark Shadows? La misma noche, The Proposal en la tele, ésa comedia romántica con Sandra Bullock y el soso Ryan Reynolds, me pareció una obra maestra.


No queda más remedio que depositar nuestras esperanzas en la siguiente. Que sea buena, for God's sake!