martes, 16 de junio de 2009

Adiós, pequeño paraguas cutre

A las 10 de la mañana me cobijé bajo mi paraguas cutre de las cuatro gotas que esta mañana caían mientras me iba a la cafetería a tomar un café. Como siempre me pasa con este tipo de objetos, me dejé mi paraguas cutre debajo de la mesa y sólo me acordé de él una vez que llegué a la oficina. No tardé más de cinco minutos en volver a la cafetería a por mi paraguas. Pero ya no estaba donde lo dejé. Ni en otro lugar dentro de la cafetería. La gente es que roba hasta los mondadientes de la mesa. La gente es mala y cutre. Que se lleva hasta un pequeño paraguas que no es suyo y que de tan malo que es, se le va a romper a las primeras gotas de lluvia. Ojalá que llueva café en el campo, sí, y bolas de granizo en la ciudad para que le destrocen el paraguas y el peinado a aquél o a aquélla sinvergüenza de esta mañana. Por cutre.

¿Foto?: La-la-la-lá... la lluvia en Sevilla es una maravillaaaaa

5 comentarios:

Clark Kent dijo...

¿¿Se te olvidó el paragüas??

Aire Fresquito dijo...

Sí, otra vez en menos de dos días. Lo peor fue que nada más pisar la oficina me acordé; bajé corriendo y cuando volví otra vez ya no estaba por ningún lado. Increíble. Desde luego, el 'caco español' es el más rápido del mundo.

Clark Kent dijo...

:-(

Jo, lo siento. Yo soy tan despistado que nunca reviso mesas ni sillas ni cuando llevo yo esas cosas... Hay que ser muy ladrón... mucha gentuza hay por ahí suelta. Supongo que preguntarías a las chicas, verdad?

Lolita blues dijo...

Bueno, mujer, es un paraguas... seguro que no es tan grave. Mi última anécdota con uno estuvo muy bien... se me jod... una varilla, luego otra, caía la de dios, me mojaba más casi dentro del paraguas porque claro, hacía pendiente y un riachuelo me acabó recorriendo la espalda. Encima iba cargasísima con la bolsa de la comida, el maletón del trabajo y no sé qué más. Así que me cabreé tanto que (literalmente) lo tiré al suelo, lo pisé, lo rompí y lo tiré a una papelera. Creo que consiguió sacarme de mis casillas totalmente. Me di miedo. Jajajaja.

Aire Fresquito dijo...

Lolita, creo que los que te vieron aquel día luchando contra el paraguas lo pasaron en grande ;-) Menudo show el tuyo! Como diría Almodóvar, 'mujer al borde de un ataque de nervios'.
Yo también soy propensa a dar gratuitamente ese tipo de espectáculos callejeros, pero en fin, cosas que pasan... con los malditos paraguas.

¿Alquien tiene más anécdotas surrealistas con estos objetos?