martes, 3 de junio de 2008

Siempre nos quedará Casablanca...

Mi santo y yo hemos viajado a la ciudad que tiene nombre de película... y una película que por cierto no se rodó ni una sola toma en la susodicha ciudad marroquí. Hay que decir que Bogart y Bergman eran un poco sosos, no como mi santo y yo, que hemos comido cous-cous casero del mismo plato y nos hemos subimos con taxistas suicidas y sobrevivimos y todo. Muy pronto, las mejores tomas de la Casablanca... de verdad.

¿Foto?: Bogart y Bergman en exposición Festival de Cine de Sitges 2007.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo esperamos impacientes... ;)Abrazos!!

Anónimo dijo...

Es verdad que te sugirieron un change, tu santo por una barrica de aceitunas, y te lo pensaste?

Aire Fresquito dijo...

Ay qué ricas las aceitunas madre, qué bidones, qué cosa... (muy pronto veréis foto del paraíso aceitunero) pero no me propusieron el change finalmente. No me imagino yo a mi santo con la túnica veniendo dátiles en el zoco... aunque una barrica de esas junto a mi cama tiene su punto, oye.