miércoles, 12 de octubre de 2011

Lo que debes saber sobre Dublin... ¡SIN CENSURA! (1ª parte)

Ha llegado la hora de la verdad. Aquí vamos a empezar a contar las verdades, todas ellas, sobre esta ciudad mía en la que resido. Se acabaron las medias tintas y las mentiras piadosas. Aquí van a empezar a caer las verdades como puños, le pese a quién le pese. Y punto.
Comenzamos.
VERDAD number one: EL TIEMPO
Ay amigos, sí, vamos a tirar del tópico de siempre. De lo que se habla del lunes por la mañana nada más llegar a la oficina. De la primera frase que intercambiamos con el camarero cuando vamos a nuestra cafetería habitual.
Yo creo que al español que vive en Dublín no hay nada más que le joda que el maldito mal tiempo. Yo me río ahora de cuando voy a Madrid y oigo a la gente decir frases del tipo, qué malo hace; ya está empezando a refrescar bastante; dentro de poco voy a tener que volver a ponerme el pijama largo; etc. La gente no sabe lo que dice. En Dublín sí que hace mal tiempo. Y lo hace siempre. Por mal tiempo quiero decir día completamente nublado, de color gris, con frecuentes tormentas de lluvia muy fina. En Dublín lo que no hay es el sol. Como si de verdad alguien lo secuestrara cada vez que quisiera pasarse por este país. Pueden pasar días y días sin que veas al astro rey allá en lo alto. Creo que la última vez que lo ví fue el viernes pasado, de tres y media a cuatro y media de la tarde. Hoy estamos a miércoles. Tengo unas gafas de sol en un cajón que todavía no las he usado en Dublín. Llenas de polvo, por supuesto.
En resumen, si quieres salir a la calle un día normal en Dublín hazlo con un chubasquero o alguna sudadera con capucha. Es bueno llevar siempre en el bolso un paraguas de los pequeñitos sólo en el caso de que llueva y no haga mucho viento, porque si no, se te romperá el paraguas a la primera de cambio. No olvides agenciarte también con una botas de agua, (aquí conocidas como wallies) de esas que sólo has visto en tu vida a los pescadores en Galicia a través de TVE1. Aquí son los zapatos estrella, fuera vergüenzas.
En invierno, máximas de 10 grados; mínimas de 0 (o menos). Primavera, verano, otoño, mínimas de 8; máximas de 19.
El armario de ropa lleno de jerseys de lana de cuello alto, botas de borrego, bufandas y gorros. El resto de prendas se pueden quedar en Madrid perfectamente. Hasta el mes de marzo de este año usé para la cabeza un gorro. Me lo puse allá por finales de octubre del 2010.
El dublines medio acepta con resignación la lluvia nuestra de cada día y el color gris de los cielos. Y al que darle mucho mérito porque ellos cumplen, y de qué manera, eso de que al mal tiempo, buena cara. Y si en algún momento del día salen unos rayos de sol comparten contigo esa frase de "lovely day, isn't it?". En contraposición, el dublines de clase alta (donde entran también los jubilados), le importa tres pitos el tiempo que haga en Dublín ese día, porque el próximo fin de semana viajará a la Costa del Sol a jugar al golf y a darse un chapuzón en la playa.
La verdad amigos, es que el españolito, da igual cómo sea el tamaño de su bolsillo, nunca terminará por acostumbrase al clima de Dublín. Tiene la luz solar grabada genéticamente en la piel. Y la necesita para funcionar correctamente.
My spanish friends, después de leer este post nunca más, forever and ever, digáis que hace mal tiempo en España. Vente pa' Dublín y verás lo que te espera.

3 comentarios:

Clark Kent dijo...

"La verdad amigos, es que el españolito, da igual cómo sea el tamaño de su bolsillo, nunca terminará por acostumbrase al clima de Dublín. Tiene la luz solar grabada genéticamente en la piel. Y la necesita para funcionar correctamente"

Esta es una de las mayores verdades que se han escrito jamás en un blog. CIERTO ES.

Verónica Serrano dijo...

pues los dublineses deben sufrir de osteoporosis desde los 20 años (por eso de que el sol es necesario para fijar el calcio!!)..conclusión: come back to Spain, darling!! o bebe cerveza hasta que se te olvide que llueve ;)

Aire Fresquito dijo...

Efectivamente Verónica, los dublineses deben tener la osteoporosis por las nubes. Hasta ahora no lo había pensado, miraré estadísticas ;)

De momento, sigo aquí un poco más, así que no me queda más remedio que empinar el codo...

Cheers!